El taoísmo es una tradición filosófica y religiosa de origen chino que se basa en el concepto del Tao, que significa el camino o la vía. El Tao es el principio supremo que rige el universo y la fuente de toda existencia. El taoísmo busca vivir en armonía con el Tao, siguiendo su flujo natural y espontáneo.
El taoísmo se puede dividir en dos ramas principales: el taoísmo filosófico y el taoísmo religioso.
El taoísmo filosófico se originó con los escritos de Lao Tse y Zhuang Zi, que expresaron sus ideas sobre el Tao, la naturaleza, la moral y la sabiduría. No tiene dogmas ni rituales, sino que propone una actitud de adaptación, simplicidad y no acción forzada.
El taoísmo religioso se desarrolló a partir del siglo II d.C., cuando se incorporaron elementos del budismo, el confucianismo y la religión popular china. Tiene una organización jerárquica, un panteón de dioses y diosas, un sistema de ritos y prácticas, y una búsqueda de la inmortalidad. Reconoce a Lao Tse como el fundador y el primer dios del Tao.
El símbolo más conocido del taoísmo es el taijitu o yin-yang, que representa la unidad y la complementariedad de las fuerzas opuestas y dinámicas que conforman el Tao. El taoísmo también utiliza otros símbolos, como el trigramas del I Ching, los cinco elementos, los ocho inmortales o los animales sagrados.
El taoísmo tiene una serie de conceptos clave que explican su visión del mundo y su forma de vida.
Algunos de estos conceptos son:
– Wu wei: es la no acción o la acción sin esfuerzo. Significa actuar de acuerdo con el Tao, sin forzar ni oponerse al curso natural de las cosas. Implica una actitud de espontaneidad, flexibilidad y naturalidad.
– Pu: es la simplicidad o la no artificialidad. Significa volver al estado original e inocente de las cosas, sin añadir ni quitar nada. Implica una actitud de humildad, sencillez y autenticidad.
– Te: es la virtud o el poder interior. Significa manifestar el potencial propio de cada ser, sin imitar ni competir con los demás. Implica una actitud de creatividad, armonía y benevolencia.
– Ziran: es lo natural o lo espontáneo. Significa seguir el orden inherente del Tao, sin interferir ni manipular las cosas. Implica una actitud de aceptación, adaptación y equilibrio.